Hace unas horas he regresado de pasar como siempre, la mayor parte de la Feria en Onda. Que yo recuerde no ha habido ningún año de mi vida en el que no haya estado por lo menos los fines de semana, habrá alguien que pensará, “pues menudo descubrimiento”.

Pero claro, yo es que vivo en Valencia desde hace ahora 50 años, e ir a mi pueblo es mi vida, creo que por eso estoy vivo todavía, a la mínima que puedo cojo el coche y allá que voy, cualquier excusa es buena… Si no pudiera ir creo que ya me hubiera dado algo.

Por cierto, tengo que intentar conseguir que cuando me muera me pongan cara a Montí, quiero descansar viéndolo siendo feliz toda la eternidad. 

Todo esto que parecen chorradas, si supierais lo que siento cuando voy subiendo por el desmonte, con las mariposas revoloteándome por el estómago lo comprenderíais.

Además como los de Onda somos unos fieras, entre José Vicente Herrera y yo, les hemos hecho creer a nuestros amigos y simpatizantes del grupo de Ópera La Panderola, que nuestro castillo tenia 12.000 y pico torres (continuamente vamos añadiendo alguna), y que el tren de La Panderola era como el AVE pero más rápido.

Lo bueno es que en principio, el motivo de escribir no tiene nada que ver con el rollo que os he metido (me lio sin darme cuenta), la razón de mi escrito es que al ir a salir de Onda para volver a casa, me he dado cuenta de que me faltaba el DNI, me he vuelto loco buscándolo y no ha habido manera, me he dirigido al despacho de la Policía Municipal, he explicado el caso, les he dejado mi teléfono, y cuando hacía muy poco que había llegado a Valencia me han avisado que ya lo tenían allí. Pues nada, otra vez a mi paraíso (Onda).

Lo que no he podido ha sido enterarme de quien ha sido el paisano/a, que ha tenido el buen detalle de entregarlo, para agradecérselo personalmente y tomarnos unas cervezas y unos tordos (traídos del extranjero, claro).

Si lo lee la persona que lo ha entregado, en la Policía Local tienen mi teléfono (así tendré otra excusa para ir jeje).

Buena gente los ondenses. Un abrazo a todos.
¡Viva Onda!